Sres. Ediles Departamentales

Sres. Ediles Departamentales
Agradecemos que una vez más las puertas de la Junta Departamental, se hayan abierto para recibirnos y escuchar la solicitud que en nombre de miles de vecinos les venimos a presentar. Por su parte ustedes en su tarea de gobierno, están dando cumplimiento a la misión de atender esta sensibilidad ciudadana y fortalecer la participación de los habitantes del departamento en las cuestiones públicas.
Reconocemos y valoramos, aquel 19 de abril del año pasado en que la Junta Departamental organizó la Primera Jornada sobre Megaminería y su Impacto en la Región, con el propósito de   informar a la población sobre un tema nuevo para los uruguayos.
En el pasado año 2012, vecinos de nuestras zonas rurales, fueron compartiendo en diversos ámbitos públicos y privados, su preocupación por la incertidumbre que estaban viviendo al haberse encontrado que sus propiedades estaban pedidas para proyectos de prospección minera.
Fuimos tomando conciencia así, de cómo había llegado a nuestro país esa ola de expansión acelerada de las industrias extractivas cuyas actividades tienen muchas veces impactos negativos en la vida de las poblaciones afectadas.
Motivados por estas inquietudes, un  conjunto  muy diverso de ciudadanos de nuestro departamento nos hicimos eco de esa alerta que también recorre los países de nuestro continente latinoamericano. Se pide a los Estados que implementen, apliquen y lleven a cabo procesos de consulta que faciliten la participación de las poblaciones afectadas por los proyectos mineros y en la toma de decisiones sobre la posible aprobación de esos proyectos
Se constituye entonces la Comisión «Tacuarembó por la Vida y el Agua» y el 19 de octubre del año pasado, en esta casa, tuvo lugar el lanzamiento  de esta iniciativa ciudadana; iniciar una campaña de recolección de firmas pidiendo que se declare el departamento de Tacuarembó libre de minería metalífera a cielo abierto.
En este Centro-Norte del Uruguay, tenemos el privilegio de contar con una de las reservas de agua dulce más grande del mundo: el Acuífero Guaraní, que tiene como zona de recarga de su inmenso tesoro, el territorio dentro del cual nos encontramos.
Sabemos que estamos situados en una de las zonas de mayor diversidad de especies y ecosistemas del país, donde ya conviven la ganadería, la agricultura y la forestación.
Hemos recibido esta valiosa tierra para que queriéndola mucho,  la cuidemos al beneficiarnos de sus frutos y la defendamos de todo aquello que pueda dañar la posibilidad de que la encuentren sana los que vengan después de nosotros. No tenemos que olvidar que la tierra no es una herencia de nuestros padres sino un préstamo de nuestros hijos.
Y así lo entendió lo ciudadanía que rápidamente hizo suya esta iniciativa y multiplicó la conciencia sobre el tema haciendo posible llegar a concretar la llegada de este día. A todos nuestro reconocimiento y gratitud.
Apreciamos y compartimos el muy valioso aporte que nos brindó el Juicio Ciudadano sobre minería a cielo abierto en Uruguay, ejemplar instancia de reflexión y deliberación participativa.
En las conclusiones difundidas se nos advierte que es necesario;
–              Un intenso e informado debate con la más amplia participación ciudadana, que garantice que las decisiones tomadas en una u otra dirección obtengan el más amplio consenso técnico, político y social.
–              Admitir que no existen o no se conocen en nuestro país planes o estrategias de desarrollo a mediano y largo plazo para poder decidir cuáles inversiones se adaptan o no a nuestro país.
–              Considerar que el desarrollo debe ser medido no sólo en términos de aumento del PBI.
–              Que no existen o no son del todo precisos los estudios que permitan a los tomadores de decisiones, hacer los cálculos de pérdidas y ganancias relacionadas a los impactos de los proyectos.
–              Considerar que no hay antecedentes a gran escala en Uruguay sobre cómo restaurar o evitar que se dañen ecosistemas de los que no tenemos aún cabal idea de cómo funcionan
–              Que tampoco parece haber en nuestro país, por diversos motivos, la cantidad y diversidad de especialistas para monitorear y hacer cumplir en tiempo y forma los procesos de control y seguimiento necesarios.
–              Considerar que esta omisión de planes, estudios y demás, inhabilita para marcarles a las empresas privadas normas de cuidado ambiental precisas.
–              Considerar también la carencia de que Uruguay no cuenta con un relevamiento preciso sobre su patrimonio histórico, arqueológico e inmaterial lo que nos pone en peligro de perder en forma definitiva las huellas de ese rico pasado.
El acto que estamos protagonizando sucede en este año 2013 en que las Naciones Unidas lo han declarado «Año Internacional de la Cooperación en la Esfera del Agua», y que se inscribe en el Decenio Internacional para la Acción «El agua, fuente de vida 2005-2015».
Sr. Presidente de la Junta Departamental y  Sres. Ediles:
Transcurridos 8 meses que han significado recorrer caminos de mucho trabajo y compromiso, pedimos consideren la justicia de nuestro reclamo y tomen las decisiones que correspondan a ello. Ponemos en sus manos 13.000 firmas que expresan la voluntad de estos ciudadanos y legitiman esta INICIATIVA POPULAR PARA DECLARAR LIBRE DE MINERÍA METALÍFERA A CIELO ABIERTO A LA ZONA RURAL DEL DEPARTAMENTO DE TACUAREMBÓ.
Custodiemos la tierra y el agua de nuestro territorio, porque es la casa de todos.
Comisión «Tacuarembó por la vida y el agua»
Tacuarembó, 27 de junio de 2013.